«Parece una maldición que ha llegado a nuestros pueblos…», menciona con gritos de dolor, de rabia y desconsuelo uno de sus familiares más queridos. En la comunidad Shushug (distrito de Imaza, provincia de Bagua), cuna de los hermanos Kinin, hay otras muertes que se lloran en los últimos días: Dionisio Roca y Carmen Wasmit, también víctimas de la pandemia COVID-19, y se temen por lo menos por cuatro pacientes que se encuentran en gravedad.
Por: Segundo Herrera y Gerzon Danducho – CAAAP Amazonas
20:25|25 de junio de 2020.- Pareciera que la muerte se ensañara cada día más con las comunidades nativas y con quienes siguen siendo los más olvidados. La desesperanza se convierte en un sentimiento que no encuentra consuelo ante la desolación y la desgracia de muchas familias awajún y frente a un Estado ausente históricamente. La tardía e insuficiente la respuesta del Estado,así como la falta de medidas efectivas con estrategias interculturales claras desde sus inicios, ha dado lugar a la grave propagación del COVID-19y el incremento de número de contagios y muertos en los territorios de los pueblos indígenas. Ahora es muy difícil controlar los impactos de la pandemia que se extiende cada día en las comunidades.
Hace unos días, se dio cuenta de la muerte del hermano Hernán Kinin Inchipish, comunicador social de ORPIAN-P y de AIDESEP, en Imaza. Hoy, con el dolor que compartimos con sus familiares y que seguramente aún no ha sido superado, se suma la lamentable e irreparable pérdida de otro compatriota awajún, luchador social y líder indígena, quien en vida fue,el profesor ARTURO KININ INCHIPISH, hermano de Hernán, procesado también, desde el 2009 por los hechos ocurridos en la estación 06 de Petroperú y patrocinado judicialmente desde hace dos años por el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica, CAAAP, ante la Sala Penal de Apelaciones y Liquidadora Transitoria de Bagua. A Arturo y a Hernán los defendimos porque estamos convencidos de su inocencia. Ambos ya no podrán demostrarlo y limpiar su nombre, lo cual agudiza aún más el dolor de sus familiares.
«Parece una maldición que ha llegado a nuestros pueblos…», menciona con gritos de dolor, de rabia y desconsuelo uno de sus familiares más queridos, sentimientos que compartimos y nos solidarizamos con ellos. En la comunidad Shushug (distrito de Imaza, provincia de Bagua), cuna de los hermanos Kinin hay otras muertes que se lloran en los últimos días: Dionisio Roca y Carmen Wasmit, también víctimas de la pandemia COVID-19, y se temen por lo menos por cuatro pacientes que se encuentran en gravedad sin acceso a servicios de atención y menos con posibilidad de ir a una unidad de cuidados intensivos. En la comunidad, según señala sus dirigentes, hay una gran cantidad de casos sospechosos ¿Estos casos están en los registros del Estado? ¿Están considerados para la atención por las redes de salud de la zona o del Ministerios de Salud?
Desde el CAAAP, demandamos al Estado, la pronta e inmediata ejecución del Plan de intervención del Ministerio de salud para Comunidades Indígenas y Centros Poblados Rurales de la Amazonía frente a la emergencia del COVID-19 que cuenta con un presupuesto aprobado para atender y mitigar las consecuencias de la pandemia. Exigimos que la implementación del plan se haga en coordinación y con la participación de las organizaciones indígenas regionales y locales, que conocen las comunidades que actualmente se encuentran en más alto riesgo.