Imagen referencial (Barbara Fraser)
13:56 | 22 de agosto de 2016.- Un nuevo derrame de petróleo se registró en el distrito de Urarinas, en la provincia y región de Loreto. Se trata del tercer derrame que ocurre en este distrito en menos de 26 meses. En junio de 2014, cerca de la comunidad nativa kukama de Cuninico, en la quebrada del mismo nombre, se reportó el vertido de más de dos mil 500 barriles producto de un fisura en el Oleoducto Norperuano que opera la empresa estatal Petroperú. En noviembre del mismo año se reportó otro derrame cerca de la comunidad de San Pedro, también del pueblo Kukama.
Juan Carlos Ruiz Molleda, abogado constitucionalista del Instituto de Defensa Legal (IDL), fue quien alertó del hecho al publicar anoche en su cuenta de Facebook el reporte de Hilter Yuyarima, agente pastoral de la comunidad nativa Nueva Alianza. Según dicho reporte, el derrame se dio en la boca del río Urituyacu, tributario del río Marañón. Exactamente dos comunidades más arriba de Cuninico.
El hecho acaba de ser confirmado por la propia empresa que precisa que “las fugas” ocurrieron a la altura de los kilómetros 54.2 y 55.5 del Tramo I del Oleoducto. A través de un comunicado, la estatal informó que un “equipo de respuesta de emergencias, integrado por profesionales especializados de la empresa internacional INMAC, ya está presente en la zona, ejecutando el plan de contingencia.”
Petroperú señaló además que “las fugas ya fueron controladas, evitando así su desplazamiento en el canal de flotación.” Según información del Vicariato de Iquitos, un grupo de comuneros también se ha trasladado a la zona acompañado de una comitiva de autoridades locales. En unas horas se espera contar con su versión de los hechos.
En breve también se espera conocer el reporte del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA). Según informó un representante, una brigada de este organismo ya habría llegado a la zona del derrame y se aguarda su retorno para más precisiones. Cabe señalar que, de acuerdo a Petroperú, las causas del derrame ya están en investigaciones.
Vale precisar que en su comunicado, Petroperú señala que las operaciones del Oleoducto “están paralizadas desde febrero de este año”, hecho que no se condice con un incidente ocurrido en junio último. A finales de dicho mes se reportó el vertimiento de crudo en el kilómetro 213 del tramo I del Oleoducto, en el distrito de Barranca, provincia de Datem del Marañón, en la región Loreto. Este hecho, que puso en evidencia que el ducto seguía bombeando, motivó que días después renunciara a su cargo el entonces presidente de la empresa estatal, Germán Velásquez.
El derrame en Nueva Alianza ocurre a menos de dos semanas del vertido de crudo reportado en el distrito de Santa María de Nieva, en la provincia de Condorcanqui, región Amazonas.
