Durante el foro “La otra crisis sanitaria: Los afectados con metales tóxicos en la sangre”, el apu Alfonso López, presidente de ACODECOSPAT, explicó cómo las actividades extractivas practicadas sin control desde hace 50 años en la región Loreto repercuten hoy en la salud de las nuevas generaciones y pidió soluciones urgentes.
Por: CAAAP
12:50| 01 de diciembre de 2020.- El presidente de ACODECOSPAT, Apu Alfonso López, habló fuerte y claro sobre el impacto que ha tenido el desarrollo de actividades económicas extractivas en territorio de los pueblos indígenas de Loreto. Informó que, en los últimos 50 años, la falta de regulaciones adecuadas para proteger los ecosistemas que rodean a las comunidades indígenas, ha causado que el Estado identifique más de 3.000 puntos en el Perú contaminados con metales tóxicos.
Durante su intervención en el foro “La otra crisis sanitaria: Los afectados con metales tóxicos en la sangre”, el presidente de ACODECOSPAT recalcó que es necesario empezar, de una vez, a trabajar de forma conjunta y articulada con las autoridades para crear un plan integral de atención a las personas afectadas por las actividades mineras y petroleras. Lamentó que el Estado priorice la inversión de empresas transnacionales sobre la salud de las personas.
“No nos serviría mucho si tenemos un hospital con los mejores técnicos, con los mejores especialistas, si el veneno va a seguir fluyendo por nuestros territorios, por nuestras quebradas, por nuestras cochas. Si los pescados que comemos los van a seguir siendo contaminados por metales pesados. No nos va a servir de mucho porque siempre vamos a seguir enfermándonos”, indicó el apu Alfonso López.
Sostuvo además que, si bien estas actividades generan mucha riqueza económica, también causan pobreza cultural, intelectual y física. Asimismo, la contaminación con metales pesados no solo ha provocado la destrucción de territorios, sino también la aparición de enfermedades en los adultos mayores y las nuevas generaciones, que hasta hoy no han recibido la atención ni la justicia que merecen.
López refirió que la Plataforma Nacional de Afectados y Afectadas por Metales Tóxicos debe continuar trabajando para que el Estado haga realidad un plan de remediación en los territorios que han sido afectados por la extracción de petróleo y minerales. En esa línea, hizo un llamado a luchar porque se respete el derecho de las próximas generaciones a la construcción de un futuro mejor.
“Estamos a puertas de que el Estado entregue nuestros territorios y nuestros lotes de explotación petrolera a nuevas empresas. Sin embargo, no se remedia. Nuestro planteamiento, desde un primer momento, es una atención especializada a todos los afectados. El Estado hasta ahora no ha podido entender que quienes vivimos en esta parte también somos seres humanos que sentimos”, puntualizó.