El padre Carlos Riudavets (izquierda) fue primero profesor, luego director y finalmente promotor del colegio. Foto: Vía El Comercio
-Organización indígena de la región pide a ciudadanos y rondas campesinas y nativas colaborar con las investigaciones para que el hecho no quede impune.
14:40|11 de agosto de 2018.- El cuerpo atado de pies y manos, y sin vida del sacerdote jesuita Carlos Riudavets Montes fue hallado la mañana del viernes en su habitación en el colegio Valentín Salegui, colegio Fe y Alegría Nº 55, en el distrito de Imaza, provincia de Bagua, región Amazonas.
El móvil del crimen es desconocido aún, mientras, la consternación se mantiene en la zona.
Riudavets Montes, de 73 años, era originario de Sanlúcar de Guadiana (Huelva, España) y empezó su trabajo en la región Amazonas en 1980, en el colegio Valentín Salegui, con estudiantes de los pueblos indígenas Awajún y Wampis.
Diversas instituciones han condenado el hecho y piden celeridad en las investigaciones; el pronunciamiento más reciente es de la Organización Regional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Norte del Perú (ORPIAN-P) que pide a los ciudadanos de la zona «colaborar con la investigación para encontrar al culpable del asesinato».
Este llamado se hace extensible a las rondas nativas y campesinas, presidentes de comunidades y de organizaciones indígenas de diversas cuencas, según se lee en el pronunciamiento firmado por Salomon Awananch Wajush, presidente de la citada organización regional.
«Estoy completamente consternado, herido y avergonzado… las autoridades tendrán que investigar», manifestó Isaac Paz Suikai, intérprete y traductor awajún, quien estudió en el Valentín Salegui cuando Riudavets se desempeñaba como director.
Paz recordó que el sacerdote jesuita destacó por su «amplio servicio a la juventud» y que «no hay ningún tipo de justificación para lo que ha sucedido».
Actualmente Carlos Riudavets se dedicaba a ser promotor del colegio. Antes, hasta el año 2011, había ejercido el cargo de director.
Pronunciamiento de la ORPIAN-P sobre graves hechos que vienen ocurriendo en la región.
Sobre las circunstancias del crimen la policía aún no ha dado a conocer mayor información. Si bien en un primer momento se habló de signos de violencia con un elemento punzocortante, la Compañía de Jesús, orden religiosa que agrupa a los jesuitas, manifestó en un comunicado hoy que según los peritos «no se encontraron signos del uso de arma blanca».
Una versión que citan algunos medios de comunicación es que el autor del crimen sería un exalumno que habría sido expulsado por el sacerdote jesuita y que lo estuvo amenazando.
Al respecto Víctor Hugo Miranda, portavoz de la Curia Provincial de la Compañía de Jesús en el Perú, dijo en entrevista con el diario El País, que no tienen información de que lo hubiesen amenazado, «pero siempre hay tensiones porque los chicos viven allí».
Fermín Tiwi, abogado awajún quien se dirigió hasta las instalaciones de colegio para obtener información una vez conocido el hecho, lamentó la muerte del sacerdote y manifestó que una situación de este tipo no se puede tolerar. «Las investigaciones determinarán quiénes son los autores», dijo.
Tiwi también recordó su época de estudiante bajo la dirección de Riudavets. «Crecí en el seno de los curas, de las monjas, fui criado como un hijo más, me apoyaban», aseveró.
Al colegio Valentín Salegui asisten alumnos varones que cursan los grados de secundaria, y que proceden de comunidades nativas de los denominados cinco ríos: Marañón, Chiriaco, Nieva, Cenepa y Santiago. El colegio tiene un internado, el cual por estas fechas tenía pocos alumnos por haber sido temporada de vacaciones. El lunes se retoman las clases.
«Muchos de los líderes en distintos espacios y organizaciones awajún y wampis han pasado por el colegio», dijo el portavoz de los jesuitas a El País. Riudavets «será enterrado en el Vicariato de Jaén, el lugar al que ha dedicado su vida», agregó al mismo medio.
