22:20|13 de agosto de 2018.- El Consejo Permanente de los Pueblos Awajún (CPPA) manifestó su rechazo y condena al asesinato del padre jesuita Carlos Riudavets Montes, quien se desempeñaba como promotor de la escuela Valentín Salegui, Colegió Fe y Alegría Nº 55, en el distrito de Imaza, provincia de Bagua, región Amazonas.
«El pueblo Awajún y Wampis está de luto y se suma a este doloroso caso, porque el sacerdote jesuita hizo su total entrega de su vida al servicio de la Educación, en la formación de los jóvenes», dice el comunicado de la organización con fecha de hoy.
El mismo señala, además, el compromiso de los pueblos «a contribuir en el proceso de la investigación para que la justicia ordinaria defina la sanción a los responsables».
Asimismo, la organización indígena invoca a la Compañía de Jesús, orden religiosa que agrupa a los jesuitas, a que pese a lo ocurrido, siga acompañándolos en el proceso de su «crecimiento integral» como lo han estado haciendo hasta ahora.
Por su parte, el Consejo Indígena Amazónico del Perú (CIAP), así como la Organización Central de Comunidades Aguarunas del Alto Marañón (OCCAAM) y la Federación de Mujeres Aguarunas del Alto Marañón (FEMAAM) manifestaron su repudió al asesinado del sacerdote de 73 años, cuyo cuerpo maniatado y sin vida fue hallado en la cocina de su residencia, dentro de la escuela Valentín Salegui, el pasado viernes 10 de agosto.
De otro lado, a través de un pronunciamiento, las mismas organizaciones expresaron su confianza en que los policías y fiscales a cargo de las investigaciones den con los autores del crimen.
Finalmente, en otro punto, reconocieron la trayectoria de Carlos Riudavets en territorio Awajún y Wampis. «El Padre Carlos Riudavets Montes S.J. siempre quedará en la memoria de la juventud y de los pueblos Awajún y Wampis», concluye el pronunciamiento.
Mientras las investigaciones continúan a cargo de la Policía y Fiscalía, los restos de Riudavets Montes fueron sepultados el domingo en Imacita, localidad en donde desarrolló casi toda su carrera sacerdotal y pastoral.
Por su parte el alcalde de Imaza, Otoniel Danducho, manifestó que el padre Carlos trabajó 38 años compartiendo con el pueblo su conocimiento, buscando el desarrollo de los pueblos y de las comunidades indígenas, “es por eso que el pueblo lo llora, estamos pidiendo que capturen al asesino o asesinos del padre Carlos Riudavets”, concluyó en declaraciones al diario La República.