Pronunciamiento
15:19|17 de julio de 2019.- Es legítimo hacerse la pregunta sobre cuáles fueron los motivos que llevaron al Presidente Vizcarra a otorgar la licencia para la explotación del proyecto Tía María a la empresa Southern Perú unos pocos días después que voceros de los gremios empresariales pedían, en un tono de exigencia, que el gobierno “de señales” de la importancia de retomar “la senda del crecimiento”. Es un asunto por transparentar.
El Ejecutivo ha manifestado que el proceso, a partir de ahora, será a través del dialogo con la población de las localidades de la zona de influencia de la mina. Sin embargo, el traslado de contingentes policiales en gran número nos parece inoportuno y solo contribuye a elevar la tensión. Exigimos corregir esa decisión precipitada, consideramos que el diálogo debió impulsarse antes de entregar la licencia de construcción.
Las opiniones de los voceros de Southern, y de los gremios empresariales, posteriores al otorgamiento de la licencia, son de una astucia, que raya en lo perverso, queriendo convencer a los pobladores de las pingues ganancias individuales que obtendrían de la inversión minera. Mientras que los pobladores de El Tambo tratan de abordar la situación con un discernimiento prudente, aunque no sea fácil hacerlo, al verse rodeados de un gran contingente policial. Hemos sido testigos de las declaraciones de dos exministros como Herrera Descalzi y Ricardo Giesecke[1], éste último indicando que estando en Arequipa, no ha encontrado siquiera estudios, realmente existentes, del prometido proyecto de desalinizar las aguas de mar, por parte de la empresa.
Es claro que la segunda versión del EIA debió ser evaluada por la misma entidad que formuló más de 100 observaciones a la primera versión y no por funcionarios del MEM, entidad cuyo objetivo es promover la gran inversión minera.
Del mismo modo, las opiniones de los representes de las comunidades, gobiernos locales y regional sobre los riesgos para las fuentes de agua y otros posibles impactos ambientales son entendibles dada la existencia de experiencias lamentables en otras zonas del país donde se ha desarrollado la minería.
En este sentido, desde la Asociación Nacional de Centros de Investigación, Promoción Social y Desarrollo – ANC, nos sumamos a los pedidos de diálogo transparente. Y que conduzca a acuerdos que representen posibilidades de desarrollo sostenible en la región de Arequipa.
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Fuente: Asociación Nacional de Centros de Investigación (ANC)