La Organización Regional AIDESEP Ucayali (ORAU) ha emitido un pronunciamiento público donde se indica que la persona que en un primer momento auxilió e informó del hecho se confesó finalmente como autor material de la muerte del indígena cacataibo, quien venía luchando por el reconocimiento ancestral de su comunidad y denunciando a los invasores de tierras. ORAU exige que se identifique y detenga a los autores intelectuales
Por: CAAAP
16:15|15 de abril de 2020.- La muerte del líder indígena cacataibo Arbildo Meléndez Grandes el último domingo hizo sospechar, desde el primer momento, que no se trataba de un accidente. A pesar de que, inmediatamente, no se pudo afirmar con rotundidad que fuera un asesinato, muchos lo presagiaron ya que el jefe de la comunidad nativa Unipayacu, distrito de Codo de Puzuzo, Provincia de Puerto Inca, Región Huánuco, era un ferviente defensor de los derechos humanos y territoriales de los pueblos indígenas. Concretamente, venía exigiendo la titulación del territorio ancestral de su comunidad reconocida el año 1995. Sin embargo, las autoridades del Gobierno Regional de Huánuco y la Dirección Regional de Agricultura de Huánuco, nunca atendieron la demanda de la comunidad pasando casi 30 años de gestión territorial.
Luego de las primeras 48 horas tras el suceso, la Organización Regional Aidesep Ucayali (ORAU), emitió un pronunciamiento donde se indica que “el supuesto testigo Abel Ibarra Córdova, quien auxilió e informó el hecho, se confesó a las autoridades competentes durante la investigación como autor material del asesinato del líder indígena Cacataibo”. El documento, con fecha 14 de abril, también indica que el líder indígena venía recibiendo hostigamientos, amedrentamientos y amenazas de muerte de parte de los colonos y traficantes de tierras en la zona, siendo denunciados algunos hechos, pero las autoridades no accionaron “como siempre sucede cuando los líderes indígenas presentan sus denuncias”.
Es en base a esta muerte violenta que desde ORAU, así como la base FENACOCA que representa al pueblo Cacataibo, se exige justicia y se demanda, a nombre de sus familiares y de la comunidad, una investigación exhaustiva para identificar a los autores intelectuales del asesinato y que ellos también “sean condenados de acuerdo a Ley”.
A continuación el pronunciamiento público de ORAU: